viernes, 2 de diciembre de 2011

Juan Cirerol

Cirerol. Extraño apellido para un tipo extraño. Pude haberlo descubierto hace año y medio, pero al ver su video de “Toque y Rol”, junto con los de Alexico, Blue Shit, y Yo! Linares (todos en el blog Mi Abuela es jazzista), me dio la impresión de que se trataba de otro regiomontano-clasemediero-alto-con-sueños-indies-austintexanos-de-ser-la-mera-neta-del-hipster mas; así que ya no le escarbe. Y Creo que me equivoque gacho.

Juan Cirerol, es un vato de 24 años de Mexicali, Baja California (La ciudad mas septentrional de México, según Wikipedia; sepa la madre que significará eso) .
Según el mismo, desde morrito se fue clavando con el country y los grupos norteños de la old school( entiéndase Ramón Ayala y sus Bravos del Norte, Los Alegres de Terán, Invasores de Nuevo León, etc.) y eso lo refleja en su música. Después de superar su etapa puberta-rockera( esa en la que aun muchos seguimos a pesar la calvicie y la panza cagüamera), después de la distorsión y el punk rock californiano, Juan cirerol decide que lo suyo es la guitarra de palo. Y es aquí donde esta lo interesante, por que aun cuando sus canciones se mueven entre el country y las norteñas, destilan una actitud punketera que ya quisieran muchos grupos de dicha movida; una frescura y desfachatez que enganchan a la primera (en mi caso fue a la segunda) oída y una vibra re cabrona que retrata a la perfección al clásico compa norteño, pachanguero, dicharachero, chelero y despreocupao.

Este es el lado lúdico de Juan Cirerol, su aspecto desmadroso que no duda en rendir pleitesía al Piporro (Para muestra escúchense “¿Como la ves carnal?”) a la vez que retoma las enseñanzas del Johnny Cash mas corrosivo y pasado de reata. Pero cuando el camarada le cede el paso
a la nostalgia, es capaz de crear canciones tan llegadoras, con frases tan encueradas, tan directas, que atraviesan la carne como flechas.
Y es por esto que Juan Cirerol no es una emulación y mucho menos una parodia; una vez que uno se le acerca lo suficiente, se puede ver al Cirerol que esta mas allá de sus héroes e influencias; se logra distinguir a un tipo vulnerable con las mismas ansias, dudas, dolores y anhelos que compartimos toda la bola de weyes que de alguna u otra forma vivimos la punzada noventera.

Escuchando a Juan Cirerol y a Martin del Prado (su entrañable compinche y excelente guitarra requinteadora y bajosextera), me regodeo en mi identidad norteña, me convenzo de que sus letras son francas y que el tipo con acento golpeado es neto, que no trata de apantallar. Muy bien se podría considerar a este vato de Chicali (como llaman con cariño sus habitantes a Mexicali) un neo rupestre de botas y camisa vaquera y aun así no se si al paso del tiempo el mote le venga quedando corto, tal como le paso a San Rockdrigo, solo que al Profeta del Nopal el terremoto ya no le dio shampoo de conectarle un pedal fuzz a su lira madreada.

Con un disco destinado a convertirse en clásico y que va que vuela a ser obligada referencia dentro de la pataleada escena rockeril mexica (Ofrenda al Mictlan, editado por
Vale Vergas Discos, de donde se puede descargar gratuitamente), además de un montón de videos grabados jocosamente en locaciones que van desde mercados y taquerías hasta centrales de autobuses y peditas en patios particulares, Juan Cirerol apuesta por lo espontaneo y la autogestión y aprovecha la capacidad de difusión del internet para hacer llegar su cotorreo a la mayor raza posible. Su talento hace el resto.
Así que en estos tiempos de “indies” con ínfulas primermundistas, no queda más que volver a las raíces, abrir una caguama bien helada, subirle a la grabacha y recetarse los anarco-corridos del Cirerol, que no?


ANUNCIO NO PAGADO:
Para llevar a tocar a Juan Cirerol y Martin de Prado a tu ciudad, sólo tienes que mandar un correo a juanantoniocirerol@gmail.com con el asunto: ''Contratación'' o llamar al numero 55 18 55 69 76.

Las fotos las tome prestadas del site
Me Hace Ruido( muy buena entrevista, por cierto), de aqui y del myspace de Cirerol.

Todo Fine.